La empresa Apple ha demandado a GEEP, un antiguo socio especializado en el reciclaje de residuos electrónicos con sede en la ciudad canadiense de Barrie, por revender al menos 100.000 teléfonos iPhone, tabletas iPad y relojes Apple Watch que debían reciclar, según informó un portal especializado.

Incluso esta cifra podría ser más elevada si se tomaran en cuenta las unidades que acceden a Internet a través de wifi.

En los 3 años que van desde enero del 2015 a diciembre del 2017, la compañía dirigida por Tim Cook envió cerca de 5,2 toneladas de sus dispositivos a GEEP, empresa que debía recuperar componentes reutilizables y destruir el resto.

La sorpresa se dio tras efectuar una auditoría de los aparatos, el gigante tecnológico estadounidense determinó que el 1% de ellos aún sigue conectándose a Internet a través de redes móviles, por lo que se evidenció que su exsocio habría vendido ilegalmente al menos 103.845 dispositivos que se había comprometido a destruir.

Incluso esta cifra podría ser más elevada si se tomaran en cuenta las unidades que acceden a Internet a través de wifi.
Desde GEEP no niegan los hechos descritos en la demanda, aunque atribuyen toda la responsabilidad a tres de sus empleados, quienes habrían actuado de manera independiente y serían los únicos beneficiarios de la trama.

Por su parte, Apple insiste en que esas personas son directivos de alto nivel dentro de la empresa y exigen una compensación 22,7 millones de dólares. Además explicó que se comercializan unidades reparadas solo si las mismas pasan los controles de calidad, algo que los aparatos enviados a reciclar no hacían, es decir, no calificaban para sus estándares de venta.Appledemandareciclar